Web3 internet inteligente - Delfos - Jaime Alvear

Web3, el internet inteligente.

¿Que es la web3?

La la Web 3.0, la información es procesada por computadoras en lugar de por humanos. Esto significa que las computadoras pueden leer y entender la información, lo que permite una mayor automatización y personalización de los servicios en línea. La Web 3.0 se basa en tres tecnologías principales: la inteligencia artificial, la tecnología blockchain y el Internet de las cosas (IoT). La inteligencia artificial es la tecnología que permite a las computadoras aprender y adaptarse al entorno en el que se encuentran. La tecnología blockchain es un sistema descentralizado que utiliza criptografía para garantizar la seguridad y la privacidad de los datos en línea. Por último, el Internet de las cosas (IoT) es la red de dispositivos conectados a Internet que se comunican entre sí y con otros sistemas informáticos.

Una de las principales características y diferencias diferencias entre la  web2 y la web3 es que esta última nace descentralizada nace descentralizada. La web2 está controlada por un número reducido de empresas tecnológicas que añaden un filtro suplementario a la información y los datos. Por el contrario, la Web 3.0 se apoya en tecnologías descentralizadas como el blockchain para garantizar la seguridad y la privacidad de los datos en línea. La descentralización  busca la creación de sistemas que permitan la colaboración y la toma de decisiones distribuida sin la necesidad de un intermediario que lo gestione. Además desde el punto de vista de la gestión de datos personales, los usuarios tienen un mayor control y privacidad sobre los mismos.

¿Qué es lo debes saber sobre la web3?

La Web 3.0 está íntimamente relacionada con los NFTs (Tokens No Fungibles), las criptomonedas y los tokens. Estas tecnologías son parte integral del ecosistema de la Web 3.0 y se utilizan para habilitar nuevos casos de uso y aplicaciones en línea que no eran posibles en la Web 2.0. Los NFTs son un tipo de token digital único que se utiliza para representar activos digitales, como obras de arte, música, vídeos y otros tipos de contenido. Estos tokens se pueden comprar, vender y negociar en línea y se almacenan en una cadena de bloques, lo que garantiza su autenticidad y propiedad. Por ejemplo, los artistas pueden vender sus obras de arte como NFTs, lo que les permite mantener el control sobre su propiedad intelectual y obtener una parte de los ingresos generados por la venta de sus obras de arte en el mercado secundario.

Las criptomonedas, por su parte, son una forma de moneda digital que se utiliza para realizar transacciones en línea. Estas monedas se almacenan en una cadena de bloques y se pueden comprar y vender en línea.

Por último, los tokens son una forma de activo digital que se utiliza para representar la propiedad de un activo, como una acción o una propiedad inmobiliaria. Estos tokens se almacenan en una cadena de bloques y se pueden comprar y vender en línea.

¿Qué otras aplicaciones encontramos en la web3?

Las carteras digitales o wallets, son aplicaciones o dispositivos que permiten almacenar y gestionar criptomonedas, nfts o tokens de forma segura. Estas carteras no almacenan los activos propiamente dichos, sino las claves privadas y direcciones necesarias para acceder, gestionar y transferir dichos activos. Pueden ser carteras de software (aplicaciones en ordenadores o dispositivos móviles), carteras de hardware (dispositivos físicos) o incluso carteras de papel (códigos QR impresos en papel). Algunas wallets permiten interactuar con servicios financieros, como intercambios de criptomonedas o plataformas de préstamos. Esto facilita las operaciones financieras en el entorno descentralizado..

Es importante destacar que las wallets son un componente fundamental para la seguridad de las criptomonedas, ya que las claves privadas deben mantenerse en secreto. Se recomienda elegir wallets confiables y tomar precauciones para proteger las claves privadas, como utilizar autenticación de dos factores y realizar copias de seguridad regulares.

Las Finanzas Descentralizadas (Decentralized Finance en inglés), se refiere a un conjunto de aplicaciones y servicios financieros construidos en blockchain y que operan de forma descentralizada, eliminando intermediarios tradicionales como bancos o instituciones financieras. El DeFi busca descentralizar y democratizar el acceso a servicios financieros, brindando a las personas el control directo sobre sus activos y transacciones.

Las aplicaciones DeFi se basan principalmente en la tecnología blockchain, en particular en la plataforma Ethereum. Algunos ejemplos comunes de servicios DeFi incluyen:

  1. Préstamos y créditos: Las plataformas DeFi permiten a los usuarios prestar y pedir prestado criptomonedas sin intermediarios. Los préstamos se realizan a través de contratos inteligentes, lo que agiliza el proceso y reduce los costes asociados con los préstamos tradicionales.
  2. Intercambios descentralizados (DEX): Los DEX permiten el intercambio de criptomonedas sin la necesidad de un intermediario centralizado. Los usuarios pueden comerciar directamente entre sí a través de contratos inteligentes, lo que proporciona mayor transparencia y seguridad en las transacciones.
  3. Yield farming: Es una práctica en la que los usuarios prestan o bloquean sus criptomonedas en plataformas DeFi para obtener rendimientos. A cambio de bloquear sus activos, los usuarios reciben tokens adicionales como recompensa.
  4. Tokenización de activos: El DeFi permite la creación y comercio de tokens que representan activos del mundo real, como bienes raíces o acciones. Esto facilita la inversión y la liquidez de activos tradicionalmente menos accesibles.

El DeFi ha ganado popularidad debido a su capacidad para ofrecer servicios financieros más accesibles, rápidos y transparentes. Sin embargo, también presenta riesgos asociados, como la falta de regulación y la posibilidad de contratos inteligentes defectuosos. Por lo tanto, es importante realizar investigaciones y comprender los riesgos antes de participar en aplicaciones DeFi.

Los contratos inteligentes son programas informáticos que se ejecutan automáticamente y cumplen acuerdos preestablecidos sin necesidad de intermediarios. Estos contratos están escritos blockchain y contienen reglas y condiciones específicas. Su principal ventaja es que son inmutables y transparentes. Una vez que están en la blockchain, no pueden ser modificados y todos pueden ver su contenido. Esto brinda confianza y elimina la necesidad de confiar en terceros. Es importante tener en cuenta que los contratos inteligentes son tan buenos como el código en el que se basan. Si hay errores o vulnerabilidades en el código, pueden ser explotados. Por eso es crucial auditar y probar rigurosamente los contratos inteligentes antes de su implementación.

Por último, no puedo terminar este post sin hablar del metaverso, el espacio virtual compartido y tridimensional donde las personas interactúan entre sí y con objetos digitales en tiempo real. Es como un mundo virtual inmersivo donde los usuarios pueden explorar, comunicarse, crear y participar en diversas actividades. En el último año todas las empresas tecnológicas están construyendo uno, es increíble, se han vuelto muy populares debido a los avances en realidad virtual (VR), realidad aumentada (AR) y la inteligencia artificial (IA).